BIOGRAFÍA
Daniel del Pino nació en Beirut, Líbano en noviembre de 1972. Empezó sus estudios musicales en Rabat (Marruecos), continuando su formación en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid,
Ha actuado para las Sociedades Filarmónicas de Segovia, Valencia, Pontevedra, Vigo y Gijón, en los Festivales de Segovia, León, Cadaqués, Otoño Soriano, Quincena Donostiarra, El Escorial, Alfás del Pí, Úbeda, Ayamonte, Altea, Verbier (Suiza), Piano en Saintonge (Francia), Morelia (México), Haifa Chamber Music Society (Israel), Chamber Music Internacional (Dallas, EEUU) y es invitado asiduamente en el Festival de Newport (Estados Unidos). Ha estrenado obras de los compositores José Zárate, Francisco Lara, Elena Kats-Chernin, Nikolai Kapustin y Antón García Abril entre otros.
Daniel cuenta también con numerosos Primeros Premios en concursos nacionales e internacionales (“Fundación Guerrero”, “Ciudad de Ferrol” y el “Gran Premio de su Majestad
Ha sido jurado de numerosos concursos tanto nacionales como internacionales y ha impartido clases magistrales en “Klagenfurt Masterclass” (Austria), Boston University, EuroArts en Leipzig (Alemania), en el Curso Internacional de Música de San Esteban de Gormaz (Soria), Presjovem de Lucena, el “Edward Said National Conservatory of Music” (Universidad de Birzeit, Palestina), así como en la “Jordan Academy of Music” (Amman, Jordania). Sus conciertos han sido retransmitidos por Radio 2 Radio Nacional de España, RTVE, ABC Classical de Sydney, SWR 2 (Stuttgart, Alemania), Televisión Nacional de Taiwan, Televisión de Rumania, Radio Televisión de Morelia (México), NPR de Estados Unidos (Radio Nacional Pública), WGBH de Boston, WFMT de Chicago, y las radios de Libreville y Dallas. Ha grabado la integral de los estudios de Chopin y Goyescas de Granados, para el sello Verso; el disco “Live in Villa San Lorenzo” con el contrabajista italiano Alberto Bocini (NBB Records), un monográfico sobre García-Abril junto al Cuarteto Leonor y José Luis Estellés, “No Seasons” y “Minds” junto a Ara Malikian y
Daniel en Guadarrama. Foto realizada por Almudena Alfaro Aguilar
ENTREVISTA
Y además de todo esto, es vecino mío.. y director
del maravilloso Cita con los clásicos que todos los años nos ameniza el duro
invierno.. y al que acudimos, caigan rayos y truenos o chuzos de punta un
montón de vecinos y no vecinos.. que tenemos el espíritu inquieto y ganas de
buena música..Acudimos al que, para nosotros, es “el mejor auditorio del mundo”
la Casa de la Cultura Alfonso X
El Sabio de Guadarrama y en una sala multiusos donde Daniel pone su antiguo
piano de estudio.. bien afinadito, para que el pianista de turno, si lo hay,
nos dé el gran concierto.
Daniel es una persona que siempre te sorprende. Es
evidentemente un músico de formación clásica pero.. es mucho más que eso.. en
sus conciertos te cuenta cosas, muchas cosas, de la partitura, del compositor..
de las circunstancias vitales del mismo.. incluso recuerdo un concierto en el
que nos contó donde había encontrado una partitura en concreto.. él mantiene
que al público nos gusta que el músico nos hable.. y ¡es verdad!, te descubre a
gente como Kapustin, tiene escarceos con el jazz… o con la zarzuela.. (ya no
digo con la música española.. sino con algo tan poco pianístico como la
zarzuela).
F. Liszt. Rigoletto-Pharaprase.. Jardín de Belagua
Daniel,
haber nacido en Beirut y haber empezado en la música en Marruecos.. ¿crees
que te ha dado una visión diferente de la música clásica a la que podían
tener los chicos de tu misma edad, estudiando en Madrid?. ¿hay algo
distinto cuando estudias en un país donde parte de la población ve la
música como algo “poco correcto”?. Igual estoy muy equivocada o tú no
tuviste esa percepción al ser tan joven.
En Beirut sólo estuve
hasta los tres años, por lo que no tengo ninguna memoria del tiempo que pasé
allí. Marruecos sí fue una parte importante de mi vida, allí empecé mis
estudios de piano, con una profesora marroquí recién graduada del conservatorio
de París. Está claro que haber vivido en varios países me ha aportado una
visión más amplia del mundo, no sólo de la música. Es también una falsa
creencia el pensar que en esos países se ve la música como algo “incorrecto”,
eso quizás sea cierto en una pequeña minoría, con la que, por lo general, no
tuve trato. Ellos tienen grandísimos músicos (sobre todo en oriente próximo)
pero es una música radicalmente distinta a la nuestra. Su música popular está
muy arraigada entre la población, no así la música “culta”, la música clásica,
a la que por lo general sólo tiene acceso la gente de más nivel socio-cultural.
Es un bien un poco elitista de momento. Está claro que siempre que uno viaja y
conoce mundo, ve las cosas con otros ojos, sobre todo si realiza los viajes con
ojos abiertos.
Al principio hacía como la
mayoría de los pianistas, tocar repertorio estándar, aunque siempre me
interesaba descubrir nuevos compositores. El momento decisivo fue el primer año
que fui al festival de Newport, en Estados Unidos. El director Mark Malkovich,
por desgracia fallecido hace tres años en un trágico accidente, era un gran
amante de redescubrir compositores. Compositores que en muchas ocasiones habían
sido muy famosos en su época y pasaron al olvido, a veces de forma
incomprensible. Él me hizo interesarme, investigar y entender lo importante que
es rescatar compositores olvidados. Debido a la cultura de masa que tenemos, lo
que no llega al gran público tiende a desaparecer de forma muy injusta.
Entiendo que se programe más a Chopin que a Henselt, pero no que nunca se
programe a Henselt. Es un ejemplo. Aparte, sinceramente ¿qué más podemos
aportar a una Appassionata de Beethoven que ha sido tocada por millones de
magníficos pianistas? En cambio cuando tocas música de Dohnanyi, Moscheles,
Henselt (por citar algunos de los menos desconocidos) estás en terreno por
explorar y puedes aportar mucho más, aparte de la satisfacción que produce
hacer descubrir por primera vez esos compositores al público.
Concierto núm. 21 de Mozart. K46,
Sascha Mandl, conductor. Kenosha Symphony Orchestra
¿Cómo
te planteas tu día a día como pianista..?¿qué es lo que más te gusta
hacer?.
No me lo planteo, es lo
que soy, es mi vida y hace parte de ella de una forma que no cuestiono. Es
parte de mí. Lo que más me gusta hacer es tocar el piano. No significa que sea
lo único, sería muy triste que fuese lo único, pero sí es una actividad
necesaria para mi bienestar.
De
la idea que tenías sobre lo que era el mundo del concertista de piano
cuando empezaste a dar conciertos, a la que tienes ahora.. ¿hay un
abismo?.
Creo que nunca tuve una
idea previa de cómo sería ser concertista, todo ha venido de forma muy natural.
Y no ha variado mucho desde los primeros conciertos. Sigo estando igual de
nervioso o más, cuando tengo conciertos desearía no tenerlos, y cuando no los
tengo, estoy deseando tenerlos… Creo que somos muchos con esa relación de
amor-odio. Cambian los escenarios y muchos otros factores pero la esencia sigue
siendo la misma. Lo que sí cambia con la edad, es que cuando se empieza (por lo
menos la gran mayoría de nosotros) uno quiere ser un gran concertista, tocar
con la Filarmónica
de Berlín todos los meses y las expectativas son siempre muy altas. A medida
que uno va adquiriendo madurez, viendo mundo, descubriendo los miles de
pianistas excelentes que hay por todo el mundo, poco a poco (alguno de forma
más lenta que otros y algunos nunca lo hacen), aceptan su espacio en el mundo
de los conciertos. Y con un poco de suerte, como en mi caso, se sienten muy
afortunados de tener lo que tienen y estar en el punto en el que están. No es
que uno deje de desear tocar con la Filarmónica de Berlín, pero digamos que si no lo
hace, no es el fin del mundo y de hecho asume que hay muchas más probabilidades
de que no ocurra nunca que de que ocurra. Uno aprende a disfrutar con otras
cosas que llenan la vida, que al final son mucho más importantes. Es una
cuestión de equilibrio.
No, y si lo han hecho, no
me he enterado. En general he tenido mucha suerte, incluso en mi época de
concursos, tengo un recuerdo fantástico de todos mis compañeros. Todos
queríamos ganar, pero recuerdo un gran compañerismo y siempre era una ocasión
de reencontrarnos y pasarlo bien.
Hay
una “leyenda” que dice que aprendiste a tocar a Chopin.. oyendo los
cassettes de los estudios en el coche de tu padre.. una y otra vez,
durante las muchísimas horas de viaje desde Madrid a Marruecos.. ¿Qué hay
de cierto y cómo es posible hacer esto?. (Aclaro, sin volverse loco o
volver loca a la familia que te acompaña).
Vayamos por partes…
Aprendí a tocar Chopin estudiando muchísimas horas y con profesores estupendos.
¡Sería estupendo poder aprender a tocar un instrumento tan sólo escuchando
discos! Pero no suele ser así… Lo que sí es cierto es que me impregné de su
música desde muy joven, efectivamente en los viajes entre Ceuta y Rabat, y en
ocasiones, luego de Algeciras a Madrid. A mis padres les encanta la música
clásica, espero no haberles vuelto locos, no lo parecen… Está claro que el oír
los estudios una y otra vez en el coche me permitió familiarizarme con ellos.
Luego el aprendizaje es mucho más fácil y rápido. Mi padre me enseño a leer
música con uno de los estudios. El comparar lo que oía con lo que veía me hizo
entender mucho más rápido cómo funcionaba la lógica de la escritura. No pasé
por el solfeo en ese momento. Afortunadamente.
Creo que me llevo bien… No
con toda… Pero es que no creo que sea tan distinto, hay música barroca que no
me gusta nada, y otra que me encanta. Lo mismo con música romántica. Por un
lado considero una parte importante de nuestra labor el difundir obras de
compositores actuales. Por otro me encanta descubrir, y ser el primero en tocar
una obra siempre es un acontecimiento. El tiempo pondrá en su sitio (de forma
más o menos merecida) la obra en cuestión. En esos casos soy un simple
presentador. Como ya sabes, puedo disfrutar igual con una obra de Jorge Grundman
(de corte más tradicional, y absolutamente tonal) que con una de Francisco Lara
(de corte más disonante y atonal). El problema con la música contemporánea es
por un lado la SGAE ,
con sus cobros abusivos y por otra que la mayoría de los compositores ocupan
puestos políticos que usan para programar sus obras. Lo que quiero decir con
esto es que no se debe imponer a la fuerza la música contemporánea. Si yo
escucho un concierto en donde una pequeña parte es de “línea dura”, no tengo
ningún problema, pero no iría a escuchar un concierto entero de este estilo. Lo
que ocurre es que la SGAE
cobra igual si tocas una obra contemporánea de 5 minutos que si todo el
concierto es de música actual. Por lo tanto cuando una institución no tiene más
remedio que pagar, pues, ya hace el concierto entero satisfaciendo de esta
manera a muchos compositores. Estos, muchas veces, ante la dificultad de que un
músico programe sus obras, logran hacerse con cargos políticos que les dan
cierto poder de decisión a la hora de programar, y acaban programándose unos a
otros, de espaldas al gusto general. Los oídos se educan poco a poco, no a la
fuerza, ni despreciando todo lo que no es extremadamente disonante y
extravagante.
Tu
forma de tocar es brillante..hermosa, técnicamente perfecta (no solo me
estoy acordando de esos increíbles estudios de Chopin.. recuerdo también
el concierto para piano y orquesta nº.5 de Camille Saint-Saëns, El Egipcio
que he oído varias veces contigo al piano, o las maravillosas versiones de
la obra de Kapustin, tan difícil, eres un gran pianista Daniel, que además
conecta muy bien con el público, emocionas, haces vibrar… pero sigo
pensando en que se ha cometido en este país una gran injusticia con los
grandes músicos de tu generación… (espero que puedas hablar de esto).
¿Porqué se sigue contratando mucho más a pianistas extranjeros en los
grandes auditorios en España y en los grandes ciclos de piano.. si algunos
no son mejores que los españoles?.. (si te incomoda hablar de esto, lo
dejas).
Muchísimas gracias por los
comentarios. Me he ruborizado… Estoy de acuerdo en parte con la segunda parte
de tu pregunta, acerca de los pianistas extranjeros. Pero creo que es
importante puntualizar. Es cierto que en España un nombre acabado en “ov”
siempre ha tenido más gancho que un “Pérez” o “González”. En España, y en gran
parte del mundo. Salvo en unos pocos países, en la gran mayoría se aprecia más
“lo de fuera”. Igual que me puedo quejar muchas veces en España, también se
pueden quejar de mí en Estados Unidos. Toco muchísimo en ese país, y seguro que
hay muchos pianistas mucho mejores que yo que podían haber hecho el mismo
concierto. Es inevitable hoy en día que haya competencia de todas partes del
mundo. Y siempre habrá músicos de países más necesitados que estén dispuestos a
tocar por mucho menos que un local (últimamente quizás no…). En ese aspecto no
llueve nunca a gusto de todos. Hace poco oía a un gran amigo mío quejarse de
que su orquesta lo estaba pasando muy mal porque él paga bien a sus músicos y
no logra competir contra la cantidades de orquestas jóvenes que se han creado,
que apenas pagan a sus músicos, y por lo tanto pueden ofrecer conciertos a muy
bajo coste. Pero también oigo a menudo el comentario contrario, de que hay
pocas oportunidades para los jóvenes, que siempre son los mismos tocando….
¿Quién tiene razón? Cuando se es joven uno desea que le den oportunidades y
quiere que los programadores apuesten por gente poco conocida y joven. Cuando
se es más mayor se desea que los programadores confíen en el músico curtido,
con experiencia, en “los de siempre”, sin sorpresas… Es lo que tiene el libre
mercado. Los dos tienen razón. Es la lucha por encontrar oportunidades, un
espacio.
Apelando a esa sensatez que manifiestas...¿Qué
debería pasar en España para que cambie la idea que la gente tiene de la
música clásica?.. Es decir, cada vez que digo que mis hijos han estudiado
o estudian música.. me preguntan ¿y qué más?.. como si el estudiar solo
música no fuera suficiente.. ya me entiendes…. ¿tan mal hemos hecho las
cosas?..
Lo que faltan son
aficionados. Y no me refiero a amantes de la música, me refiero a músicos
aficionados (amateur), gente que toque un instrumento por placer, que no se
dedique a ello profesionalmente. Ellos son los que podrían transmitir el
respeto hacía un músico a sus colegas, familias, amigos… El problema es que la
mentalidad en España es “voy a un conservatorio a sacarme un título para luego
trabajar”, hay muy poca gente que estudie música sin intención de dedicarse a
ello. A pesar de todo, cuando me hacen el típico comentario de “si, pero eso
como hobby, pero ¿qué haces en serio?”, en el fondo me siento muy afortunado,
porque mi “hobby” me da dinero también, puedo vivir de mi “hobby”, cosa que no
le ocurre a la mayoría de la gente. Así que no me ofende nada que otros piensen
que es un “hobby”, porque lo es también.
Daniel, siempre
me llama la atención, cuando te veo en el escenario, que puedes estar
tocando lo más difícil pero como si no hicieras nada, con una gran
facilidad.. sin aparente esfuerzo y que cuando sales prácticamente no
necesitas concentrarte.. no dejas ni un minuto, llegas, saludas, te
sientas y empiezas.. hay gente que pone un gesto tal o cuál..o que
necesita esperar un par de minutos, tu no.. ¿siempre has sido así de
sobrio en el escenario o es algo que se consigue con los años?.
No me fijo mucho en cómo
me comporto en el escenario. No obstante, puedo decir que en general aborrezco
la gente que usa muchas expresiones faciales. Gente como Lang Lang (que por
otra parte, es un pianista maravilloso) ha pervertido el concierto convirtiéndolo
en una actuación de teatro exageradísima. Es el equivalente a contar un chiste
y explicarlo a continuación. Se desvirtúa un poco la música cuando se la
“ilustra” con el gesto. Por una parte, eso es lo que quiere la masa del
público, porque creen que entienden mejor la música, cuando en realidad no
dejan su imaginación fluir libremente. Es una pena que tantos buenos pianistas
le intenten emular.
¿Hay
alguna música, algún compositor o una época en especial, que te guste
más?.. porque tienes grabaciones de todo tipo.. entre los CD’s que has
grabado.. está Chopin, por supuesto y Schumann y Beethoven, música
española de Granados, pero también de García Abril o Jorge Grundman.. por
cierto.. ¡qué cosas tan increíbles las que compone este hombre! ¿no?..(Grundman
digo y espero poder entrevistarle muy pronto, tengo un auténtico interés casi exagerado por saber de él), y una incursión en el mundo del jazz.. primero acercándote con el
gran Kapustin (no es jazz exactamente pero suena muy parecido).. y luego
con Andreas Prittzwitz.. ¿qué tipo de música es?.. jazz no es, clásico
tampoco.. ¿cómo lo llamamos?.
Fauré Cuarteto con piano
celebrado en Berneck, Suiza
Siempre me han gustado
muchos estilos de música. Desde luego, el jazz, el que más. Entonces, todo lo
que se parezca o tenga alguna influencia del jazz, me gustará. El disco con
Andreas Prittzwitz, para mí fue un experimento, mi primera incursión (tímida,
por cierto) en el mundo de la improvisación. Siempre me ha gustado improvisar,
pero en casa, sólo, no delante de un público, y menos grabarlo. He tenido la
suerte de hacerlo en compañía de Andreas, que ha sido una gran fuente de
inspiración. Por otra parte, Chopin sigue siendo mi favorito. Los que me
conocen saben también qué compositores no me gustan demasiado… Pero en general,
tengo gustos bastante amplios. Grundman es un compositor fantástico, escribe
una música sencilla, directa, sin pretensiones, algo muy difícil de encontrar
hoy en día. Siempre es un placer tocar su música.
¿Cómo
es posible tener tan buenos amigos y que sean además grandes músicos que
vienen siempre al ciclo Cita con los clásicos?.. Teniendo en cuenta el
altísimo nivel musical que tienen los conciertos que programas..¿cómo se
consigue eso?.. Hablamos de un ciclo en un pueblecito de la Sierra madrileña que
por nivel musical y artístico podría compararse ¿a los grandes ciclos,
famosos ciclos?..
Como bien dices, tengo
buenos amigos y además muchos de ellos son grandísimos músicos. Es una suerte,
sin ellos no podría organizar un ciclo como el que organizo en Guadarrama.
Puesto que no tenemos mucho dinero, intentamos ofrecerles buena compañía, un
público excelente (todos los que vienen a tocar lo comentan) y sobre todo mucho
agradecimiento, por mi parte, y por toda la gente que asiste fielmente a los
conciertos. El altísimo nivel lo traen ellos. Como les conozco, en muchas
ocasiones, sé que van a actuar en alguna zona próxima y aprovecho su viaje para
que hagan una parada en Guadarrama. Es un pueblecito en la Sierra madrileña en donde
hemos tenido la suerte de topar con un equipo en el Ayuntamiento con
sensibilidad hacía estos proyectos. En una zona donde durante 30 años Sierra
Musical ha estado celebrando conciertos en verano, creando afición. El camino
ha sido mucho más sencillo gracias a ambos. Sin el apoyo del Ayuntamiento y de
Sierra Musical, en todos los aspectos, no habría sido posible.
Daniel en el Festival Rafael Orozco de Córdoba... seguramente contando alguna anécdota o comentando en qué circunstancias se creo una partitura o qué vida tenía el compositor.. típico en él.
¿Qué
lugar ocupa en tu vida la pedagogía?.. Porque no solo tienes una gran
carrera en el piano.. es que tu labor pedagógica no se queda atrás
precisamente.. ¿Qué te aporta la enseñanza.. o qué sientes.. cuando
enseñas? Y se que te gusta porque muchas veces los espectadores de tus
conciertos nos convertimos en alumnos por un ratito.. y atendemos como
estudiantes, encantados de oír lo que nos cuentas.
Es importante en la
carrera de un músico poder ofrecer lo que anteriormente se le ofreció. Es una
vivencia fundamental, hacemos parte de un engranaje, de una cadena, que no se
puede romper. La enseñanza me hizo descubrir muchísimas cosas. Muchas veces uno
toca por intuición, porque cree que es lo mejor, pero al tener que enseñar,
explicar, no es suficiente, hay que buscar maneras de transmitir, y eso nos
hace explorar, indagar, cuestionarnos. Descubrimos nuevas dimensiones de las
obras y de nuestra forma de tocar. También es muy gratificante seguir las
carreras de jóvenes que en algún momento se han cruzado contigo, ver su
evolución, saber lo que les has aportado, y a veces hasta reconocer en cierto
modo tu influencia en ellos.
Imagino
cuál va a ser tu respuesta y te pregunto esto porque precisamente tú has
pasado por épocas en varios países de distintos continentes pero… hay que
preguntarlo..¿en el mundo de la música, es importante salir fuera de
España, aunque sea durante un tiempo?..
Creo que es importante
“salir”, se esté en España, Estados Unidos, Alemania, o el Congo. El salir abre
nuevos horizontes, nos hace conocer otras maneras de vivir la música, la
cotidianidad, la vida. Es lo más enriquecedor, y eso sólo se puede descubrir
viviendo en los sitios, no visitándolos una semana.
Proyectos… Estos nunca
faltan… Sueños tampoco. Otra cosa es que lleguen a fraguarse… De momento me
gustaría poder seguir haciendo lo que hago, que ya me parece un lujo, dado los
tiempos que corren. Conciertos cercanos… El 11 y 13 de octubre en Italia junto
al contrabajista italiano Alberto Bocini, con quién ya grabé un disco, el 22 y
23 en Rumanía con la violinista Cristina Anghelescu, el 5 de noviembre en el
Teatro Arriaga de Bilbao junto a Andreas Prittwitz, el 7 en Córdoba un recital
de estudios (entre ellos la integral de los estudios de concierto Op. 40 de
Kapustin), el 12 “Bach to the Future” en Vitoria, el 19 otro recital solo en
Torrelodones. Lo más cercano es esto. En cuanto a Cita con los Clásicos,
todavía no podemos desvelar todo, pero te puedo dar alguna pista, nos visitará
la soprano Pilar Jurado junto al pianista Aurelio Viribay, el dúo “la Extraña Pareja ” con
el pianista Federico Lechner y el armonicista Antonio Serrano, y un concierto
muy interesante de Bayán, similar al acordeón, por el virtuoso ucraniano
Alexander Hrustevich. Y mucho más…
No puedo evitar poner algo de un concierto de ésta temporada que nos dejó a todos.. ¡tan impresionados!.. y que vi en Toledo.. en la magnífica y misteriosa Sinagoga...
Rachmaninov: Cello & Piano Sonata in Gm. III:"Andante". Cellist Amit Peled.
¡Suena fantástico y me estoy frotando las manos porque soy de los afortunados espectadores que va a los conciertos de Cita con los Clásicos en Guadarrama... y me quedo colgada de ese ... "y mucho más"...
¿Has
podido descansar un poquito este verano?.. porque el final de temporada..
julio y agosto han sido tremendos.. igual te veíamos en el Auditorio
Nacional que te ibas a Estados Unidos, Suiza o Francia.
No, este verano no he
descansado casi nada. Suelo intentar aprovechar pequeños descansos en cada
sitio a donde voy, pero no he tenido un descanso real, de desconexión. Espero
tenerlo en diciembre.
¿Cómo
ves el nivel musical en España?.. hablo de cómo suenan orquestas,
solistas…¿hay todavía tanta diferencia entre una orquesta de cualquier
país con un buen nivel y una de aquí?.. y el futuro.. ¿lo ves tan negro
como parece.. o eres más optimista?.
El nivel en España… ¡qué
difícil contestar! Vayamos por partes. Lo primero, insistir en que grandes
talentos y músicos geniales los ha habido siempre y seguramente los seguirá
habiendo, son los que se forman a pesar de todas las dificultades que puedan encontrar. El nivel medio de los
pianistas, en mi generación, no era comparable al de otros países como
Alemania, Austria, Rusia… Luego hubo un periodo de mejoría, y ahora hemos
vuelto a bajar el nivel. El motivo es la reforma educativa musical, que
constantemente va en contra del músico-intérprete y del músico con talento. Ya
en mi periodo de educación en el Conservatorio de Madrid, había demasiadas
asignaturas innecesarias y hacían muy difícil a la persona con otro tipo de
inquietudes encontrar un sitio, era un sistema muy poco flexible y que no
premiaba el talento. Pero ahora es muchísimo peor, cada vez más se quiere
alargar el periodo de aprendizaje de “cultura general”, dar un barniz cultural
lo más amplio posible, hasta los 25 años a veces. El periodo de máximo
aprovechamiento y de progreso, tanto
técnico como musical, es entre los 10 y los 20 años,
durante esta etapa uno debería poder concentrarse en lo que ha elegido. Si ha
elegido musicología, concentrarse en la historia, el análisis… Si ha elegido
interpretación, concentrarse en tocar, música de cámara, improvisación,
asignaturas “prácticas”. En cuanto a otros instrumentos, sobre todo los de
cuerda, han cambiado mucho las cosas. En mi generación el nivel (salvo siempre
unos pocos casos de grandes músicos) era bastante bajo en comparación con
países del este y de centro-Europa. Hoy en día ya no se puede decir lo mismo.
En las pruebas de las orquestas, los jóvenes españoles acceden con el mismo
porcentaje que cualquier otro país de referencia. En las grandes orquestas ya
no sólo se encuentra “viento” español, también cuerda. En cuanto a las
orquestas “nacionales”, ¿cómo se puede pretender decir que son de más bajo
nivel que una de fuera, cuando la mayoría de sus músicos son “de fuera”?
Orquestas excelentes como la de Castilla y León, se componen mayoritariamente
de músicos extranjeros, supongo que tocan igual de bien que en sus países de
origen…Hoy en día es difícil hablar de orquestas de “aquí” o de “allá”, la
globalización ha hecho que los mejores músicos de todo el mundo busquen los
puestos de trabajo en cualquier parte del mundo. No, no creo que haya tanta
diferencia entre orquestas españolas y de otros países. En cuanto al futuro,
no, no soy pesimista. Lo único que sería saludable cambiar sería impedir que la
gente que dicta los planes de estudios musicales siga haciéndolo. Por el bien
de futuras generaciones.
Bueno.. Daniel.. lamentablemente la entrevista con
preguntas ya establecidas pierde frescura con respecto a si las hubiéramos
hecho.. en directo, pero.. ¡qué le vamos a hacer!. Te felicito por un acontecimiento personal muy íntimo que sé que va a ocurrir dentro de muy poco en tu vida y que supongo llevas con mucha alegría y te deseo lo mejor, mereces
lo mejor en todo .. Muchas gracias.. por tu amabilidad y por los grandes momentos que nos haces pasar en el Ciclo, nos veremos en el próximo
concierto. Saludos a tu madre, tan simpática y alma-mater también del Ciclo Cita con los clásicos.
Gracias, y perdón por el terrible retraso. Un abrazo, Daniel
Y, como siempre, ese pequeño regalo hacia nuestro entrevistado... como sabemos que le gusta la música de Kapustin... ahí va algo especial. El propio Kapustin tocando su música.
No hay comentarios:
Publicar un comentario